lunes, diciembre 04, 2006

 

Comunicación y poder

Una vez oí a Jean-Marie Colombani (el director del periódico francés "Le Monde") algo que me hizo pensar mucho: que hoy en día "todos los poderes se entienden a si mismos en términos de comunicación". O, dicho de otro modo: la comunicación ya no es un medio para alcanzar el poder, sino que es el poder mismo. Las luchas simbólicas no son la fachada de algo más, son las únicas luchas por el poder.

Esta visión, un tanto radical, puede que sea la clave para entender los acontencimientos de estos últimos días. Porque de eso, de una lucha por los simbolos, es de lo que se trataba. ¿Que pretendía el PRD con su espectáculo en el congreso? ¿Qué sentido tiene mantener tanta tensión para, finalmente, permitir la ceremonia? ¿Debe entenderse el hecho de que la ceremonia finalmente tuviera lugar como una derrota del PRD, tal como han querido hacerlo ver desde el PAN?

Yo creo que no. Yo creo que nunca hubo una intención real de impedir la ceremonia (cosa que, por otro lado, hubiera tenido unas consecuencias reales bastante limitadas) sino de impedir que se diera una imagen de normalidad. El PRD trata de asentar su mensaje de "excepcionalidad", de situación límite, de conflicto irresuelto, y en ese sentido todo el lamentable espectáculo de los últimos días era bastente efectivo. Por su lado, el PAN leyó bien la situación y ha hecho todo lo posible por dar el mensaje contrario. Por ejemplo, con la insistencia de los medios en que el traspaso de poderes "de verdad" se realizaba en la ceremonia de Los Pinos la noche anterior, o con la estrategia de no aceptar un cambio de sede. O, sobre todo, con el discurso de Felipe Calderon en el Auditorio: "si se pudo, y si se puede".

¿Qué pretende el PRD con esos mensajes, qué estrategia hay por detrás, que es lo que "de verdad" quieren conseguir? Pues, enlazando con lo que decía en el primer párrafo, la respuesta es: nada. Se intenta lanzar el mensaje de excepcionalidad y "fallo del sistema" para que exista esa excepcionalidad. Si ese mensaje llega, si la gente se lo cree, pasa a ser verdad (este es el sentido último de entender el poder como comunicación: uno tiene tanto poder como capacidad tenga de hacer creer a los demás lo que desee) Si, por el contrario, el mensaje que llega es el de "todo normal, todo bien", el sistema si que funciona y "si se puede", como dijo Calderón.

Ahora bien, analizando esto "en términos de comunicación", la acción del PRD fue bastante poco limpia. Cuando uno lanza un mensaje y no puede controlar a quien va a llegar, como en este caso, hay que tener mucho cuidado. Porque, por ejemplo, este mensaje llegó a los inversores extranjeros, que pueden creerselo y tomar la decisión de no invertir en México. O llegó a los partidos de izquierda europeos, que valoran fuertemente la estabilidad institucional y la responsabilidad política y, por lo tanto, prefieren no alinearse con esos mensajes de "fallo del sistema" (y así, de golpe, perdió el PRD muchísimos apoyos que le podrían haber ayudado a conseguir esa "legitimidad" que tanto necesita). O llegó al PRI, que vio que con el PRD no va a poder conseguir nada, y si mucho con el PAN, y actuó en consecuencia.

Sin embargo, el mensaje del PAN era mucho más adecuado para audiencias más amplias, y consiguió trasmitirlo de manera bastante eficiente (con un manejo mucho más "fino" de los símbolos, frente al "trazo grueso" de los mensajes PRDistas), por lo que, en definitiva, creo que si puede decirse que el saldo de esta batalla es favorable al PAN.