jueves, mayo 11, 2006

 

El voto útil y la partitocracia.

Tal vez en ocasiones sea excesivamente didáctico, pero es que realmente algunos conceptos políticos son algo complejos y tienen a simplificarse en exceso. Es el caso de dos términos que vamos a utilizar ahora, "partitocracia" y "democracia".

"Partitocracia" se refiere al hecho de que el poder real esté en manos de los partidos políticos, antes que del pueblo o la nación. Es, por supuesto, un concepto relativo, porque en sociedades complejas como las actuales, es muy difícil que el "poder real" esté en un solo sitio, sino que siempre se encuentra más o menos repartido.

El término "democracia" se usa tanto que está muy desvirtuado. En realidad, se usa para referirse a muchas cosas distintas, pero fundamentalmente a dos: a una forma de elegir a los gobernantes, y al concepto que más propiamente se denomina "estado de derecho" (que se podría traducir en "un estado capaz de garantizar que los ciudadanos no tienen más restricciones que las que impone la ley, mientras que los gobiernos no tienen más potestades que las que les otorga la ley). Aquí, voy a usarlo para referirme al primero de los conceptos.

¿Por qué es buena la democracia, en el sentido antes expuesto? Pues, según muchos autores, por la legitimidad de los gobernantes elegidos. Es cierto que la votación popular universal no es un medio especialmente eficiente para seleccionar a los mejor capacitados para gobernar (¿realmente sabe un ciudadano cualquiera lo que hace falta para dirigir un pais, y si cada uno de los candidatos tiene o no tiene esas habilidades?), pero sin duda alguna, es un medio muy bueno para legitimar a los gobernantes. Dicho de otro modo, en un sistema democrático (que funcione como tal, que no sea una farsa) es muy difícil para un candidato que no haya obtenido la mayoría proclamese a si mismo como posible gobernador legítimo. Por eso la democracia no deja de ser un sistema para desalojar gobernantes del poder de manera pacífica, y el momento más importante de una democracia, "la prueba de fuego", es la entrega del poder de un gobernante al siguiente. Por eso la democracia es el sistema más eficiente para dar estabilidad interna a los estados.

La forma actual de funcionar la democracia hace que las campañas para conseguir el voto sean extraordinariamente costosas. Además, los medios de comunicación, que juegan un papel decisivo en el conocimiento y el prestigio de los candidatos, tienen una relación muy estrecha con los partidos políticos y con los centros de poder, para defender sus propios privilegios. Estos dos fenómenos llevan a que los partidos políticos tengan una increible influencia en el funcionamiento del sistema, hasta el punto de que es "sabiduría popular" que un candidato sin el soporte de un partido fuerte no tiene posibilidades de ganar. Lo que nos lleva al riesgo de caer en la partitocracia que definíamos al principio, ya que lo importante deja de ser el voto de los electores (que, de una forma u otra, se puede "manejar") y pasa a ser la elección dentro del partido para ser candidato. Los partidos pasan a ser burocracias para elegir candidatos en vez de ser plataformas para la participación y la respresentatividad políticas.

¿Por qué es mala la partitocracia? Pues si decíamos que la principal ventaja de la democracia era la legitimidad de los gobernantes (y ojo a esto: estamos diciendo, y la historia lo ha demostrado, que es aún más importante que un gobernante sea legítimo, o sea, sea aceptado por todos los gobernados, a que sea capaz), precisamente el principal riesgo de la partitocracia es la pérdida de legitimidad. Un gobernante al que muy pocos electores no quieren, pero que, entre las opciones consideradas "posibles", es al que ha votado más gente. Lo que no significa que ese gobernante vaya a ser bueno o malo, sino algo mucho peor: que no tiene el respaldo del pueblo. Que tiene poder, pero no tiene autoridad. El riesgo de esto para la estabilidad política o social del pais es evidente, así como el riesgo de que ese gobernante esté condicionado por los mecanismos que le hecho llegar hasta ahí, que es ante quienes realmente responde, no ante el pueblo.

¿Y el "voto útil", como influye en todo esto? Pues de una manera muy directa: por un lado, perpetúa a los mismos partidos siempre en las posiciones hegemónicas (ya que beneficia a los partidos fuertes y perjudica a los pequeños), y por otro, resta importancia al candidato frente al partido (ya que "saca de la competencia" a otros candidatos sin el apoyo de un partido fuerte), lo que da más importancia a la elección "interna" en el partido.

Parece que una pequeña "pereza mental" como es dejarse llevar por la idea común, pero errónea, de que "votar por candidatos minoritarios no sirve para nada", puede tener unas consecuencias muy graves!